Después de 4 meses por tierras guaraníes, sin haber practicado nuestro deporte favorito debido a los inconvenientes de aquellas tierras, nos encontramos de nuevo como si el tiempo no hubiera transcurrido los amigos, colegas, compañeros y cómo no, camaradas “gladia´bikers”. Lo de camaradas, va en alusión a los nuevos tiempos por los que deriva este país, y al proceso de adaptación que todos vamos a necesitar.
Éramos doce más uno, los que nos encontramos y saludamos efusivamente después de tanto tiempo, aprovecho desde aquí para enviar un fortísimo abrazo a los que no pudieron venir, y que espero nos encontremos pronto para disfrutar mientras “podamos” de nuestro equipo. Os envío un saludo especial a los lesionados y os deseo en nombre de todos una pronta recuperación.
Fue un momento especial el que sentí mientras todos nos saludábamos, tenía ganas de volver y de estar entre los míos, aún cuando me dieron la noticia de; ¡¡Angel, toca la crónica!!, aquí ya empece a despertar, “joder” con saña me lo espetó, me subió hasta la adrenalina. Ni respirar le dejan a uno, así que me di la bien venida al mundo real.
Yo estrenaba la nueva montura Levo HT y estaba expectante por comprobar su comportamiento en una ruta que en principio se clasificó como “baja”, pero al estar en baja forma y que todos los demás son casi que profesionales del MTB, pues las dudas me abordaban.
Iniciamos la ruta por un sendero ya conocido, para mí espectacular y grandioso, pues tanto la vegetación, los desniveles como el estado del terreno, estaban idóneos para disfrutar, quizás la temperatura algo baja pero soportable. Pronto llegamos a la ladera del río dónde hubo que poner pié a tierra para salvar algunas rocas, pero sin más. En visto y no visto, iniciamos un ligero ascenso hasta llegar a la carretera de la república, (quizás otra paradoja de lo que serán las próximas autopistas, porque podemos verlo venir). Aquí paramos para repostar agua en la fuente y reagruparnos a fin de iniciar el descenso por la trialera, muy técnica y difícil, pero que afortunadamente no nos dio ningún susto y no hubo caídas que lamentar. Se nota que el nivel del grupo está adquiriendo tientes cuasi profesionales. Nos reagrupamos de nuevo e iniciamos el camino hasta el final de la etapa, todo trascendió sin novedades que mencionar, ya que no hubo caídas ni pinchazos, salvo una puesta a punto.
Finalmente llegamos a los coches para terminar como siempre tomándonos las cervezas de rigor, tortilla de patata española, torreznos y más cerveza, todo en la mejor compañía.
Ha sido un placer. Gracias amigos.
Angel
(escrito por Ángel) |
caídas en la ruta: (2)
pinchazos en la ruta: (0)
averías en la ruta: (0)
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