Las Navas Solana del Pino Las Rocas Cepeda Boca del Infierno Collado de la Gargantilla El Toril Los Quemados Reajuelo Cerrillo de Enmedio Las Navas 11-06-2017

Las Navas Solana del Pino Las Rocas Cepeda Boca del Infierno Collado de la Gargantilla El Toril Los Quemados Reajuelo Cerrillo de Enmedio Las Navas 11-06-2017

DATOS DE LA RUTA


HORA DE SALIDA: 09:05
HORA DE LLEGADA: 12:50
TIEMPO DE PEDALEO: 02:47
TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 03:45
DISTANCIA RECORRIDA: 43.6 Kms.
SENTIDO DE REALIZACIÓN:

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ASISTENTES: (14)

 

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Pipe Mendez
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Ramses

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El balón de reglamento.

                         Para Jesús Ángel y Maxi.

 Domingo 11 de junio de 2017.                                                                          

     La crónica de la ruta de hoy va a ser diferente con permiso de vosotros, los lectores, permiso que solicito a posteriori, una vez realizada, y así no tenéis opción de negarlo.

     La mañana se presenta calurosa y con poca concurrencia de ciclistas debido a varios factores que son comunes todas las primaveras, eventos como son las bodas, bautizos y comuniones restan miembros del grupo, otros de vacaciones y algunas faltas sin justificación conocida; motivo por el cual, nos unimos al “B” para formar un nutrido grupo ya que los integrantes del “C” deciden ir digamos… por separado y a su marcha. Ante la previsible fuerza que tomarán los rayos del sol a lo largo de la mañana preparamos la ruta hacia el lugar más fresco, a la par que agradable y bonito en primavera, los pinares del vecino pueblo de Peguerinos. La ruta discurre sin sobresaltos y con buen ánimo por parte de los dos grupos ( el “A” y el “B” ) que conseguimos terminar de forma brillante la etapa.

     Por la tarde ya, y por cuestiones de índole familiar me traslado a Ávila, al llegar me cruzo con un coche fúnebre que sale en dirección contraria, un pensamiento me perturba y me llena de inquietud pues el sábado por la tarde hablé con Jesús Ángel y me informaba del estado muy delicado de salud de Jesús , su padre. Pasadas unas horas, de regreso a casa, el omnipresente whatsapp confirma mis sospechas de que el coche con quien me crucé se dirigía a Las Navas, efectivamente, Jesús se ha ido, se ha marchado sin hacer ruido, sin querer, pues nadie quiere irse dejando a su mujer, compañera inseparable y a sus hijos, que durante más de quince años le han acompañado, cuidado y atendido en su larga enfermedad, una de esas (maldita enfermedad) que llegan un día cualquiera, sin avisar , cuando menos lo esperas y se quedan para siempre, que okupan nuestro cuerpo y no hay ley del hombre que las desaloje; de esas que hay que tratarlas no con medicinas, sino con resignación, dulzura y paciencia como hicieron María, Lorena, Juan Carlos, Maxi y Jesús Ángel.

     Durante toda la tarde me afloran a  la memoria recuerdos de la cantidad de horas que pasé en mi niñez en la puerta de Jesús, siempre con una pelota entre los pies, desde la hora de salida de la escuela a mediodía disfrutábamos de unos cincuenta y tantos minutos hasta la hora de comer y siempre en torno al futbol de calleja; entonces llegaba Jesús, puntual con su furgoneta azul en la que se trasladaba a diario a la fábrica, serio, diligente, respetable, pero en cuanto le pasábamos el balón cambiaba el semblante, daba unos pases con nosotros y nos deleitaba durante un ratito con su toque de balón, lanzamientos a puerta o penaltis. Yo hacía de portero en alguna ocasión en aquella portería cuyos postes eran un par de plataneros que Jesús tenía en su puerta de casa; jamás conseguí pararle un penalti, los lanzaba ajustados al árbol con maestría. Recuerdo también que alguna vez me sentía privilegiado si en lugar de jugar con pelota podíamos echar un algún partidillo con el balón de Jesús, era un “balón de reglamento”; no era fácil ver en esos años un balón de esa categoría en el pueblo, a los niños de entonces nos hacía sentir importantes jugar con aquel balón, era como el fútbol de verdad ( los niños de ahora no comprenden ese sentimiento); como entonces no lo hice, ahora te doy las gracias Jesús, por dejarnos el balón. También han de agradecerte multitud de chicos y mayores, que durante años, gracias a tu esfuerzo, dedicación y aportación de tiempo y en muchas ocasiones dinero de forma altruista y generosa al frente de la A.D.Las Navas, han podido practicar su deporte preferido, el fútbol, en competición provincial y autonómica defendiendo los colores de su pueblo. También fuiste precursor de otros deportes, como el tenis, ya puedes reencontrarte con tu rival, Angelito, que a buen seguro te está esperando con la cancha preparada.

     Hoy me quedo con estos recuerdos, y si alguna vez los pierdo, me será fácil recuperarles pues al practicar deporte cada domingo con Jesús Ángel y Maxi compruebo que han seguido fielmente el ejemplo de Jesús; en nuestro grupo ciclista aportan esfuerzo, compañerismo, siempre ayudan deportivamente al débil, animándole, empujándole moralmente a seguir adelante y a no desfallecer, puedo dar testimonio de ello que durante años he sido yo el auxiliado. Seguid así, pues necesitamos de esos valores que os transmitió vuestro padre.

      Espero, Jesús, que volvamos a encontrarnos, solo Dios sabe cuándo, y espero poder volver a ponerme de portero y que me lances el balón. Lo que no espero, sino que estoy seguro que sucederá, es que nunca lograré pararte un penalti ejecutado con tu balón de reglamento.

 

José Luis Méndez.

 

(escrito por José Luis Méndez)


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Salida de Las Navas


Salida de Las Navas


Salida de Las Navas


Prados del Tejar


Prados del Tejar


Prados del Tejar


Prados del Tejar


Prados del Tejar


Prados del Tejar


Prados del Tejar


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