DATOS DE LA RUTA
HORA DE SALIDA: 08:58
HORA DE LLEGADA: 13:55
TIEMPO DE PEDALEO: 03:38
TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 04:57
DISTANCIA RECORRIDA: 40.1 Kms.
TEMPERATURA MEDIA: 15.0 ºC ( mín.: 1.0 ºC máx.: 18.0 ºC ).
SENTIDO DE REALIZACIÓN: habitual
OBSERVACIONES: Ruta con paisaje espectacular, senderos impresionantes, pinchazos en abundancia y una caída en cada esquina. Muy completa.
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ASISTENTES: (21)
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caídas en la ruta: (6)
pinchazos en la ruta: (2)
averías en la ruta: (1)
NO LO ENTIENDO.
¿Y éste Sr. porqué sonríe?
Me pregunto. Tribulaciones de Domingo las 6:50 de la mañana, tras ducha breve, sueño escaso, cena excesiva, y una cerveza de más, en orden inverso… Y es que travestido con mallas negras me cuesta reconocerme en el espejo.
Conduzco una hora hasta Tortuero y me encuentro con otros 21 Sres. Sonrientes, también disfrazados al uso ciclista en una mañana heladora de cielo raso.
Tras saludos sinceros a cero Celsius, o casi bajo cero, salgo el último disfrutando de una bajada fantástica de 2 km en un sendero que va estrechándose con losas calizas a 15 m sobre el Arroyo de la Concha a nuestra izquierda… con algunas piedras sueltas y escalones que te recuerdan que caerse por el desfiladero no tiene premio … y me alegro mucho de que no esté mojado y helado como correspondería al mes de noviembre … superando la mieditis, acabo este tramo que me pareció espectacular (y más me lo parece ahora mismo tras ver el video de Flu). Nos reagrupamos y los 22 seguimos sonriendo.
Tras unos kilómetros de carretera junto al río Jarama nos desviamos por una pista, con otro desfiladero igual de interesante sobre el río, con algunos pasos poco ciclables y con bonitas vistas del Jarama al fondo. En ese momento recordé que, entre muchas otras razones, no hay muchas chicas MTB porque ellas no encuentran la gracia al reto interno de “No hay cojones” (por lo general no tienen que tener), y prefieren quedarse en casa los Domingos por la mañana … Y allí están muy requetebién … Jeje, seguimos sonriendo.
Entretanto, por supuesto las primeras caídas sin consecuencias, pinchazos, todo el mundo opinando y uno sólo reparando, guantes y mochilas que se llenan de recuerdos y piedras en cuanto te descuidas, etc. nada fuera de lo común en este fantástico grupo de MTB que no pierde ocasión de gastar una broma, o dos si te despistas.
Tras otro sendero precioso por un bosque mezclado de quejigos, robles y algún arce despistado, abandonamos el Jarama a la altura del Monasterio cisterciense del Bonaval en ruinas, que la mayoría no visitó pues parece que había prisa en llegar a Retiendas y abrirse camino en los siguientes tramos de montarral sin un sendero obvio. Tras dividirnos como siempre a lo largo de esta ruta en varios grupos de exploradores sin éxito y guías expertos con pocos seguidores, nos juntamos (viva el GPS) y recontamos en la románica Ermita de los Enebrales, donde hicimos otra foto de 22 ciclistas sonrientes.
El paso por Tamajón fue un ejemplo de la tónica general del día… somos un grupo muy heterogéneo de espíritus libres: ni siquiera hubo forma de reagruparse en la fuente del pueblo… porque hay más de una, es decir dos… ni con GPS ni móviles lo conseguimos y hasta el propio Víctor se dio por vencido. Casi casi ni protestó cuando nos dio alcance un par de km más tarde antes de pasar de nuevo por Retiendas.
Desandamos nuestro camino por el mismo bosque de quejigos junto al Jarama, igual de bonito e igual de dificil ciclar en algunos puntos, y remontamos unos 160 m de desnivel por carretera antes de hacer una variante típica de Víctor, que estuvo muy bien para casi todos salvo para uno :-( , con bajada por sendero entre vallas de piedra que nos condujeron de vuelta a Tortuero.
Ya era tarde, y en este punto el grupo de 22 se había escindido poco a poco en 5 ó 6 grupitos, cada cual según sus posibilidades y según el miedo a su domadora respectiva. Recordé que en mi pueblo decimos aquello de “El tonto en su casa, sabe más que el listo en la de otros”
Y con una sonrisa en la cara pero con el respeto debido a cada dueña todos se fueron salvo 3 que esperamos a Víctor y David… que habían ido a marcar “la variante de la variante” … y el pobre David volvió andando a duras penas tras bofetón con doble vuelta de campana. La culpa un reventón en la delantera durante la bajada.
Juventud divino tesoro, si me pasa a mí me llevan en parihuelas, pero Verdes es un roble y sí, efectivamente, aun así, también tuvo ánimo para seguir bromeando como siempre y sonriendo entre gestos de dolor.
De pronto recordé la pregunta de esa madrugada “¿Y este Sr. porqué sonríe?” … La respuesta es clara, pero si aún hay alguien que no lo entienda, que se apunte a la siguiente salida.
Postdata: De veras mil gracias mil a todos por la acogida en el grupo, y que sigamos muchos años sonriendo :-)
(escrito por Manuel Díaz)
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