DATOS DE LA RUTA
HORA DE SALIDA: 10:02
HORA DE LLEGADA: 13:00
TIEMPO DE PEDALEO: 02:09
TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 02:58
DISTANCIA RECORRIDA: 33.6 Kms.
TEMPERATURA MEDIA: 23.0 ºC ( máx.: 29.0 ºC ).
SENTIDO DE REALIZACIÓN: habitual
ASISTENTES: (7)
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caídas en la ruta: (0)
pinchazos en la ruta: (0)
averías en la ruta: (0)
Cinco ciclistas habíamos quedado en Club de Campo para partir hacia la ciudad de Guadalajara, donde nos esperaban otros dos más: Valentín y Rafa García. Lo primero de todo fue intentar colocar correctamente el porta-bicis de Ángel, de lo que desistimos para no perder demasiado tiempo. Tiempo que le vino muy bien a nuestro "fiestero" Fernando Rodríguez de Ledesma que volvió a llegar tarde, aunque esta vez no hubo que esperarle por la pérdida de tiempo con la baca de Ángel. Partimos por fin hacia Guadalajara por la autopista de peaje R-2, en tres coches: Ángel y Fernando con las tres bicicletas (las suyas y la mía) en el prius de Ángel, Javi Doblas, en su propio coche, y Víctor (yo mismo) con Javi Sánchez, en su coche. Nada más salir, Javi me advirtió sobre la limitación de altura del peaje y si Ángel se daría cuenta del tema. Al entrar en el peaje controlamos que no había problemas de altura y nos olvidamos del tema. Cuando estábamos saliendo del peaje, ya en Guadalajara, oímos un golpe cercano: ¡las bicicletas! Efectivamente, Fernando y Ángel habían arreglado España pero habían chocado nuestras bicicletas contra la barra que limita la altura: baca, porta-bicis y bicicletas se encontraban en un mismo bloque en el suelo de la autopista. Hubo que esperar a dar parte de los hechos y Valentín y Rafa tuvieron que ir a tomar café para esperarnos. Se hicieron las 10 de la mañana cuando nos montamos en nuestras máquinas, algunas de las cuales un poco dañadas por el golpe recibido. La ruta fue un bonito paseo por inmensos campos de color verde de los alrededores de Guadalajara. En uno de estos campos disfrutamos observando un grupo de venados. Pero lo que no vimos fueron plantas de patata ni de espárragos como ponía en el libro del que saqué esta ruta. Al final, cuando estábamos "empaquetando" de nuevo nuestras bicis para el viaje de vuelta, una persona nos preguntó sobre la ruta que habíamos realizado y resultó que esta persona era el escritor del libro de rutas del que sacamos esta misma ruta. ¡Qué casualidades tiene la vida! El hombre fue muy amable y se ofreció a que nos pusiéramos en contacto con él y a darnos más información y rutas actualizadas. Yo comprobé la veracidad de esta casualidad nada más llegar a casa y, efectivamente, dicho libro está escrito por Francisco Lirón, que así se llama, incluso hay una foto de él un poco más jóven. En resumen, una ruta bonita que fue eclipsada por las eventualidades ajenas al pedaleo mismo. (by Víctor)
(escrito por Víctor)
