Nos dias, hemos cambiado la hora (la hemos cambiado por un madrugón) y nos hemos presentado en Alpedrete, es Domingo hace un tiempazo de narices que ya ha llegado la primavera para aler-gía de los histamínicos. Las primeras incidencias ... las de siempre, llegando tarde el que os sus-escribe, que se arrastraba fuera de cama y a las 8 la mañana aun estaba viendo en su casa como nuestro glorioso sincuello trompeaba su bólido e inventaba el gran premio con coches en ambos sentidos; nada comparable a nuestra pareja redbull que llegaba cuando los demás ya habiamos empezado.
Bueno, cuesta abajo nos lanzamos los que ya estábamos preparados por la cuesta de la Calera alias gym-for-vibromax y tras 5 minutos de bajada y hacer ejercicio equivalente a correr media hora a 60 km/h (que es la velocidad típica cuando cazamos guepardos a la mano). Ejercicio que estimaba Nacho Gisbert equivalía a 3 o 4 pahas (unidad de medida para contar vibración extrema) y a subir todos por la primeras cuestas, que hace fresco y hay que sudar. Tras varias paradas en los sucesivos cortafuegos comienza la ascensión a Somosierra. Esta subida es chula, los que no la conocían se dieron por bienvenidos, sin muros ni descansos llegamos al cortafuegos (dura lucha entre Rafita y Alvaro ... los demás subimos como pudimos)
Sesión de barritas, bocatas, chistes de marcado caracter diezporcentual (que se lo pregunten al Alberto, no quedó claro si se controló o no) y a volver a subir el último kilómetro. Allí nos cruzamos con el grupo de EnBici, que hicieron casi la misma ruta pero con una extensión que hubiera puesto verraco a nuestro alcalde, y a bajar, a bajar todos. Pocas incidencias en la bajada, mirar el paisaje y mi pesada barriga que se asienta justo al pasar por una piedra y a recordar como se cambia una cámara. Serpenteamos la bajada (habrá que ver el nuevo video de la pareja, al parecer con excursión incluida) hasta el cruce final hacia Alpedrete y una nueva demostración de derrapes en el cruce, derrapes que acaban en hemorragia pseudo-clorofílica del cameraman. Al parecer cambiaron su bebida isotópica de siempre y no se encontraron . ¿Que habéis empezado tarde la etapa ? Pues sigamos con el cambio de hora y aquí os dejamos, salimos goteando los demás y nos acercamos a la post-etapa. Importante ... estábamos en Alpedrete.
Chema que cumplía años tal día tomó the road to villadiego porque se imaginaba el epílogo: La etapa, que a buen seguro protagonizará las próximas votaciones de rutas, concluyó en tortillas verduriadas, migatrones y cilindros high-voltage, todo ello regado por cervezas a discrección. Estos fueron los interpretes: Adolfo, Alvaro Sanchez, Angel, Chema, Dani, Emilio (el que os escribe), Evita, Fede, Javi Ignacio, Javi Sanchez, Josef, María Cool, Miguel Angel, Nacho Gisbert, Rafa Garcia, Rafita, Valentín, Victor. Queda finalmente este número, proporcionado por nuestro amigo Arsenio (the man of the tomates) en el Mesón Alpedrete, con la idea de reservar tortillas y tomates la próxima vez: 949.854.018.
(por Emilio)
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(escrito por Emilio) |