Barranca-Senda Ortiz-Pista de la Vaqueriza-Bola del Mundo 26-06-2011
DATOS DE LA RUTA
OBSERVACIONES: Un pinchazo de Maxi, rápidamente reparado, en la subida del Calvario. Caída de Curri, un nuevo ciclista amigo de Nacho Muñoz, que tuvo como consecuencia una gran hinchazón en la muñeca y que esperamos que no tuviera graves consecuencias. ⇒Ver descripción de la ruta realizada | ASISTENTES: (33)
caídas en la ruta: (1) pinchazos en la ruta: (1) averías en la ruta: (0) |
Hola a todos.
Pues no tenía yo bastante con que me tocara crónica en Las Navas, más o menos, cada tres domingos, que ahora tambien me empiezan a tocar las de las Conjuntas; esto no me lo habían avisado cuando me uní a estos pirados de la bici, sino creo que me lo hubiera pensado; joder, que yo soy de Ciencias, no de Letras!
La rutita prometía: pocos km. y mucha subida. Muchas ganas de subir a la Bola, manifestadas por la amplia mayoría de los ciclistas de Las Navas que, inesperadamente, han hecho mutis por el foro y han tirado de excusas varias para no acudir a la cita, así que nos encontrábamos en clara inferioridad numérica para defender el pabellón frente a los chicos de Club de Campo.
Salida puntual del aparcamiento del Hotel de la Barranca y empezamos subiendo, ni tiempo para calentar ni leches; enlazamos con la conocida Senda Ortiz, pero esta vez de subida. Algo aparentemente sencillo, por la poca pendiente del camino, pero que con los numerosos escalones y raíces plantea serios problemas para pasar montado sobre la bici, algo de lo que algunos pueden dar fe tras ver el barranco desde una perspectiva poco apetecible (alguno vi agarrado a un pino para no irse barranco abajo con su bici). Aquí empezamos los de Las Navas a abrirnos paso y demostramos que estamos acostumbrados al terreno complicado (con permiso del Señor Carlos Terán, que estuvo toda la mañana incordiándonos, en el buen sentido, claro). Tras el reagrupamiento, un trocito de pista y nos salimos de nuevo para coger un senderito de bajada que a algunos les pareció excesivamente difícil y a otros les colocó en una situación un poco espinosa (en este punto disculparme por no ser capaz de aprenderme los nombres de la gente; mi memoria de grillo parece que tiene problemas a la hora de vincular nombres y caras y no puedo decir quién sufrió cada percance, sólo dar fe de lo ocurrido); en el último tramo un poco difícil, mientras esperaba a que se despejara el sendero para poder bajar montado, vi como alguien desaparecía literalmente entre las zarzas y los espinos, y tuvo que ser rescatado del abrazo de la madre naturaleza. Se llevó un buen recuerdo...
Terminamos la bajada en la M-601, que cruzamos para enlazar con el camino forestal de la Vaqueriza. Gratos (y húmedos) recuerdos de haberla bajado ya en varias ocasiones. En esta nos toca subirlo, y sufrir los fuertes repechos llenos de piedras, que se bajan con plato grande y se suben con el pequeño. Joder, cuánto sufrimiento, con lo que lo disfrutamos bajando!!!
Llegamos a la Estación de Navacerrada y esperamos a todo el mundo mientras aprovechamos para coger fuerzas, y no sólo comiendo sino también psicológicas: estamos a 1750 m. de altitud y nuestro objetivo se yergue desafiante a 2259, casi nada.
Vuelta a la faena, cogemos un trocito de carretera hasta el Puerto de Navacerrada y torcemos a la derecha para coger la estupenda pista de hormigón que sube y serpentea hasta casi tocar el cielo... o el infierno, depende de cómo se vea. Quejarme de nuevo porque se duda entre esperar a los rezagados antes de dar la salida o seguir, con lo que los guapetones de siempre aprovechan para tomar una ventaja que a la postre se demostrará definitiva; yo creo que deberían haber sido descalificados y desposeídos de sus medallas; al final somos unos blandos y no nos atrevemos, pero ya les ajustaremos las cuentas. Yo, personalmente, sufrí como hacía tiempo no sufría, ni siquiera en el dentista. Empecé bien, subiendo a mi ritmo y un poquito fuerte para ver si era capaz de llegar al grupo de cabeza. Mediada la subida, incluso metí el plato mediano (iba a escribir el grande, pero seguramente nadie me creería) y apreté un poco para reducir distancias, pero se demostró un grave error que estuvo a punto de costarme caro. En el último kilómetro, no me bajé de la bici porque el pulsómetro me aseguraba que todavía no me daba el infarto y el resto lo puso el orgullo. En fin, que conseguimos llegar arriba todos vivos y con ganas de hacernos una foto, parece mentira. Impresionante vista y estupenda la temperatura por allí arriba.
Una vez repuestos los corazones, empezamos la trepidante bajada; aquí se ve la pendiente que tiene la pista, porque nada más soltar el freno, el plato grande se queda pequeño y se coge mucha velocidad. Hmm, demasiado fácil, debió pensar la mente perversa que diseñó la ruta y, a mitad del descenso aproximadamente, nos desviamos a la izquierda por la cuerda y nos empeñamos en bajar por una pedrera de dimensiones considerables. Aquí cada uno hace lo que puede; algunos bajan montados, como Alejandro y Charly, otros lo intentamos y nos tenemos que bajar de la montura con cierta precipitación, y el resto, más inteligentes, bajan a pata para no arriesgar la vida innecesariamente. Tras la pedrera enlazamos con un senderito muy bonito, sí, ese de la tubería, que baja con poca pendiente en general, pero con algunas zonas técnicas que hace que haya que estar muy atento, porque una caída por el lado izquierdo (léase por el barranco) puede ser la última. Tramo largo y muy divertido, que nos conduce al Mirador de la Barranca y casi al final de la ruta. El último tramo es ya bajar por la pista hasta los coches, pero se produce una caída de cierta importancia que acaba con un compañero lastimado (siento de nuevo no saber el nombre); esperemos que se recupere pronto y vuelva a coger la bici con ganas.
Terminamos tomándo un refresco en el bar del Hotel y satisfechos por el deber cumplido. Una señora etapa, de las que se recuerdan y se piensa siempre en repetir cuanto antes... ¡o no!
Feliz verano para todos.
(By Pablo, escritor no vocacional)
(escrito por Pablo) |
Preparativos en el aparcamiento del Hotel La Barranca
Preparativos en el aparcamiento del Hotel La Barranca
Preparativos en el aparcamiento del Hotel La Barranca
Preparativos en el aparcamiento del Hotel La Barranca
Preparativos en el aparcamiento del Hotel La Barranca
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