Como todos los domingos que es posible, me dirijo al punto de partida de nuestras rutas de MTB, en esta ocasión en compañía de Alejandro, una de las últimas incorporaciones a este gran grupo, club oooo,  como coño queráis llamarlo.

Todo apuntaba a un precioso día de bicicleteo, no se encontraba ni una sola nube a pesar de que el sábado fué día con algo de lluvia y ya en el trayecto hasta el punto de partida en el pueblo del Atazar, se dejaban ver algunos corzos campeando libremente, todo un espectáculo.

Una vez en el lugar de comienzo de la ruta fueron apareciendo poco a poco miembros del grupo, hasta completar los nueve ciclistas que hoy nos hemos reunido en este precioso pueblo para disfrutar o sufrir otra ruta de la que ya nos tiene muy acostumbrados el Sr. Alcalde.

En esta ocasión se esperaba sufrir más de la cuenta, por el poco tiempo que había transcurrido de la ruta anterior  (la Barroñosa) del Viernes Santo.

Todos listos a las 8:40 aproximadamente y con una temperatura de 3 graditos tomamos la primera bajada del Gr-88, se quedaban helados hasta los huevecillos, situación que afortunadamente no duró mucho, pues del Km 2 al Km 10 la pista se convertía en un poco rompe piernas para ir calentando y poder afrontar lo que se nos venía encima, comenzaba la verdadera subida con unas rampas que oscilaban del 6% hasta un 14% como bien comentó Javi S. a partir de este momento se nos quitarían las ganas de reír y no le faltaba razón pero poco a poco fuimos subiendo y todo era más ameno a pesar del sufrimiento, eran tan bellas las vistas que las piernas parecían doler menos, era como un analgésico. Un recorrido cargado de encanto primaveral. Después de 8Km seguidos de subida coronamos EL COLLADO DE LA PINILLA, nuestro objetivo principal de la cuenca Alta Del Lozoya donde se podía apreciar algunos restos de nieve y disfrutar de una paz y vistas sobresalientes, relajación y recuperación casi total después de la subida.

Hecha la foto de grupo comenzó la vuelta lógicamente en bajada (como se suele decir todo lo que sube baja) calculo que en esta ocasión los porcentajes serían negativos, pues no podíamos perder la vista del camino puesto que en algún momento se alcanzaron los 55 Km/h, cuando parecía terminado aún nos quedaba el postre hasta los coches, el último empujón que llegaba hasta un 17% de desnivel.

Que una ruta salga sencillamente bien, no es fácil, son muchos los factores que influyen en el resultado final, averías, clima, colaboración, recorrido y bla, bla, bla. Pues prueba superada, ni la lluvia de días anteriores ni el puente de Semana Santa impidieron que los 9 valientes termináramos la ruta y sin una sola incidencia.

La compañía de un grupo que gana madurez junto a las nuevas incorporaciones, muy buena comunicación, muy buen rollito.

Dando un cierre refrescante a la ruta que cumplió con todo lo exigible, incluso el horario, brindamos por las cosas de montar con las ya históricas cervecitas, acompañadas de unas tortillas a la ESPAÑOLA o más bien al ESPAÑOL, pues según el tabernero las cocinó su primo.

Agradecer a todos los implicados mi más sincero agradecimiento por hacer posible estos maravillosos eventos.